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Conoce la historia de la Catedral Ortodoxa Rusa de La Habana "Nuestra Señora de Kazán"

La Sacra Catedral Ortodoxa Rusa Nuestra Señora de Kazán, es un hermoso templo bizantino con bellas cúpulas en forma de bulbo, situado en la calle San Pedro entre Sol y Santa Clara en la Avenida del puerto, muy cerca de la Alameda de Paula en La Habana Vieja, Centro Histórico de la Capital de Cuba, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO

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También se le conoce como Iglesia Ortodoxa Rusa, está enclavada en una de las zonas más antiguas y hermosas de la también declarada Ciudad Maravilla del Mundo Moderno, y se levantó en la parcela que ocupaban dos edificios en muy mal estado que fueron demolidos, en San Pedro número 308 entre Santa Clara y Sol, en la Avenida del Puerto.

De las seis llamativas cúpulas con que cuenta el templo, dos están laminadas en oro (la mayor y la menor) y cuatro en bronce, coronadas por cruces de oro sólido. La escalera de granito extraído en la provincia cubana de Sancti Spíritus se dice que es la segunda más grande de las que se han construido fuera de Rusia. La mayor es una existente en Israel.

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La Catedral, fue calificada como un monumento a la amistad ruso-cubana por el titular de Relaciones Eclesiásticas Internacionales del Patriarcado de Moscú, el metropolitano, kirill, quien colocó su primera piedra en noviembre de 2004, momento a partir del cual comenzó a prepararse la obra cuyos trabajos se iniciaron en febrero de 2006 y terminaron en 2008 con la consagración de Catedral, también por Kirill, entonces Patriarca de Moscú.

Aunque el proyecto era ruso y estaba a cargo del arquitecto Rostislav Voronsov, el aspecto funcional del mismo fue asumido por la parte cubana, representada por el arquitecto ejecutor de la obra Oscar Jaime Rodríguez Cunnill y su ingeniero estructural fue Pedro Rodríguez quienes fueron a Rusia, recorrieron varios templos y confrontaron su ejecución.

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Estos destacados profesionales cubanos adecuaron la propuesta inicial que tenía un aspecto muy contemporáneo para que la catedral bizantina de cúpulas y tres desniveles no rompiera con el entorno de la zona de la Bahía de la Habana.

La edificación ocupa un área de 1200 metros cuadrados y comprende la iglesia, la diócesis y el campanario como objetos de obra. En la planta inferior se encuentra el área administrativa, el baño público, las habitaciones del padre, cocina, salón de reuniones, área técnica y sala de computación mientras que en la planta alta se halla la iglesia que puede recibir cerca de quinientas personas, a la cual se accede por dos escaleras de granito.

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Los materiales utilizados fueron los tradicionales hormigón y ladrillo, otros que preservan al inmueble de las inclemencias del ambiente marino y fue fabricado el “ladrillito panetela” muy ligero, para la cubiertas. Estos fueron puestos en el aire y pegados con yeso de rápido fraguado, y fueron colocadas tan solo algunas guías para que los albañiles pudieran mantener la posición de cada elemento. Los muros miden entre cuarenta y cinco y ochenta centímetros de ancho, grosor ideal para que puedan soportar el diámetro de los arcos.

La imagen de medio cuerpo de la Santísima Virgen que sostiene al niño Jesús sobe sus rodillas, ícono de Kazán y protectora de Rusia, fue pintada en el siglo XIII. Se dice que fue encontrada por una niña a la cual se le apareció en sueños la efigie de la santa y le indicó el lugar donde estaba escondida.

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Por la calle San Pedro está la entrada principal y hacia la Avenida del Puerto da la parte posterior de esta singular iglesia que llegó con su belleza para añadir otro portento a esta porción privilegiada de la Ciudad Maravilla por sus joyas arquitectónicas, entre las que se destacan la Lonja del Comercio y la Plaza y el Convento de San Francisco de Asís.