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Conoce el Hotel Santa Isabel: uno de los más espléndidos y mejor ubicados de La Habana

El Santa Isabel es uno de los más espléndidos y mejor ubicados hoteles de La Habana Vieja, Patrimonio de la Humanidad y Centro Histórico de la Capital de Cuba.

Su ubicación es perfecta: se erige al este de la conocida Plaza de Armas, la más antigua y una de las más bellas plazas coloniales de la principal urbe cubana, declarada Ciudad Maravilla del Mundo Moderno en 2016, justo en el número 9 de la calle Baratillo, en la esquina que forman la populosa calle Obispo y la Narciso López.

Muy cerca de él, también rodeando la emblemática plaza, se encuentran el Castillo de la Real Fuerza, la primera construcción militar de Latinoamérica; El templete, donde fue fundada la Villa de San Cristóbal de La Habana; el Palacio del Segundo Cabo, la Biblioteca Rubén Martínez Villena que fuera el Consulado de los Estados Unidos de América y el Palacio de los Capitanes Generales.

La Esplendorosa edificación que ocupa el hotel Santa Isabel es una residencia del siglo XVIII, reconstruida en el XIX que fue la lujosa mansión de los Condes de Santovenia. Las iniciales decorativas de estos pueden apreciarse en una variedad de objetos y accesorios en la instalación.

Desde 1867 fue un lugar muy visitado por artistas, hombres de negocios e ilustres viajeros de la época, que lo escogían por su elegancia y confort. Era presentado en los anuncios de esos tiempos como uno de los sitios de la Isla que servía al estilo estadounidense.

Tras una cuidadosa y rigurosa restauración fue inaugurado como Hotel Santa Isabel en 1997, dotado de un espacio interior que exhibe hoy la elegancia, el esplendor y el confort que lo caracterizaba en otros tiempos. Visitar su interior resulta un interesante viaje a través de la cultura y la arquitectura coloniales de Cuba.

Al caminar por sus pasillos pueden admirarse maravillosas lámparas, los candelabros de cristal, jarrones, cuadros y los magníficos muebles antiguos, que le dan la apariencia de un auténtico palacio colonial del siglo XIX.

Posee un bello patio interior, característico de las mansiones de esa época con una hermosa fuente y abundante vegetación, rodeado de elegantes columnas que sostienen el piso superior donde se combinan, en perfecta armonía, el esplendor de la arquitectura de la colonia con el confort de los hoteles modernos.

Un gran atractivo lo constituye también la magnífica terraza en la azotea desde donde pueden apreciarse las mejores vistas de esta zona privilegiada de La Habana y sus maravillosas construcciones y monumentos: La estatua de La Giraldilla, símbolo de ciudad, sobre la torre del Castillo de la Real Fuerza; la colosal estatua del El Cristo habanero, el Castillo de los Tres Reyes Magos del Morro, la entrada de la Bahía, La Fortaleza de La Cabaña entre otras maravillas.

En el segundo piso se hallan, trece habitaciones con balcones y diez junior suites, el Cyber Café y la Gerencia General. La oficina del ama de llaves se encuentra en el tercer piso al igual que catorce habitaciones dobles, de ellas diez poseen balcones y terraza.

Todos los aposentos están equipadas con cuarto de baño, televisión vía satélite, aire acondicionado, caja de seguridad, secador de pelo y servicio de internet.

La amplia suite del hotel se nombra Conde de Santovenia, está decorada con antiguos accesorios y posee puertas francesas que abren a una terraza grande con una impresionante vista. Ha sido visitada por dignatarios y celebridades entre las que figuran el ex presidente estadounidense Jimmy Carter, el gran actor Jack Nicholson y el prestigioso músico irlandés Sting.